- Redacción
Tlaxcala, Tlax.- Fíjese usted que me contó mi comadre Alegunda que el presidente municipal de Tequexquitla realiza trabajo social en el dif municipal del pueblo mágico, para cumplir una sentencia a la que lo obligó la Fiscalía General de la Republica, luego de estar, según las autoridades judiciales, impidiendo el debido proceso de investigación sobre una posible conducta delictiva de sus policías municipales. Por lo que si usted lo ve seguido en el pueblo mágico, se debe a esta razón. Aunque también cuenta mi comadre que tiene una excelente relación con el señor de los mil compromisos.
Pero qué les cuento, que tengo una comadre que trabaja muy cerquita, pero lo que se dice cerquita de una agencia de viajes. Mi comadre para quienes no la conozcan se llama Michelle, y me pasó al costo que la síndico municipal del pueblo mágico no hace mucho regresó de unas merecidísimas vacaciones por un crucero en el Caribe, y es que se ha desvelado tanto por el bienestar y seguridad de los ciudadanos que ya era necesario que se desconectara un rato de todos los chismes que trae la jefa de jefas. Por lo que dice mi comadre Michelle, que si nadie le cree, nada más que revisen el instagram de la servidora pública y mientras la gente común sufre por la inseguridad, los asaltos y por la ingobernabilidad, ella se dedicó a descansar para que en el último año y ocho meses que le quedan de vivir del erario, lo pueda disfrutar mucho, perdón para que pueda dar muchos resultados. Que mal pensada soy.
Recién me estoy enterando que la famosa amandititita, la más perra del Congreso, debe varios recibos del servicio de agua potable, por lo que el seriamente comprometido ya advirtió que revisará la situación impositiva de esta pelandruja para que pague sus respectivos impuestos, porque no es posible que a esta alimaña se le suelte la lengua en contra de todo lo que hace su gobierno y teniendo la cara sucia, sea tan cínica de no pagar lo que debe. Qué pena que este tipo de comadrejas sean quienes legislan y se llenan el hocico diciendo que trabajan en beneficio de los ciudadanos. De pena ajena.
Algo que también está calentando mucho los ánimos de los ciudadanos de este pueblo mágico, es el hecho de que se pagan varios millones de pesos por una deuda contraída por haber adquirido luminarias para el servicio de alumbrado público, sin embargo son muchas las quejas
sobre la existencia de muchos puntos donde las maravillosas lámparas simplemente no funcionan, como es el caso de la avenida Juárez, desde el cruce con calle Galeana hasta metros antes de llegar a la calle Abasolo. Por lo que algunas de mis comadres piden que se le pregunte a Julito Vázquez, ¿por qué en los tres años que lleva engordando en servicios públicos no se ha podido resolver este problemita?
Figúrese usted que me enteré que el área de proximidad social de la policía municipal, que según dirige un tinterillo metido a policía, nada más no hace su trabajo, pues algunos de los comités de vigilancia integrados por los vecinos de este pueblo mágico, siguen esperando que este servidor público chafa, se comunique con ellos para saber de las acciones para la seguridad. Por lo que piden que alguien le avise que debe cumplir con sus obligaciones, o de lo contrario mejor que se vaya a dar una vuelta a la hacienda que López Obrador tiene en Chiapas. Y además afirman que este disque oficial es muy sentido, como los jarritos de Tlaquepaque, porque si alguien se queja de su trabajo se cambia de nombre. Y para variar se trata de un escuintle más de los que tiene el señor de los compromisos en su administración, que no saben ni limpiarse las narices paro ya se dicen abogados, ingenieros o arquitectos.