Sin control venta callejera de alimentos

  • Ariadna Huerta

Huamantla, Tlax.- Consumir comidas y bebidas en el espacio público es un riesgo, pero en la ciudad de Huamantla funcionan en diferentes zonas comercios informales de este tipo, a pesar de que no hay cifras oficiales, se estima que la mayoría no tienen permiso para realizar este tipo de actividad comercial.

La ausencia de agua potable para lavar los utensilios y hasta sus propias manos, convierte a los vendedores en fuente de enfermedades. “A eso súmele que no hay control de residuos orgánicos e inorgánicos”, dijeron habitantes de Huamantla.

Los lugares donde su presencia es evidente son: el andador San Luis, la calle Zaragoza casi frente a la terminal de conocida línea de transporte, plazuelas como la de Santa Cruz y de Jesús, y del barrio de La Preciosa; la calle Morelos entre calle Allende y Nicolás Bravo; Josefa Ortiz de Domínguez entre avenida Juárez y Reforma; calle Roberto Covarrubias en la esquina donde se ubica la jurisdicción sanitaria.

Este tipo de puestos que ofrecen:tacos, pizas, aguas frescas, barbacoa, consomé, cocteles de frutas, cocteles de mariscos, son un eslabón más en la cadena de la venta ilegal y de la ocupación indebida del espacio público que afecta a la ciudad de Huamantla. Representan el segundo rubro más explotado en las calles del Pueblo Mágico.

“Cuando se comen estos alimentos sin control se corre el riesgo de contraer enfermedades. En estos puestos no se tiene la certeza de que se cumplan las buenas prácticas de manejo de alimentos. Yo recomendaría que no se consuman; especialmente si no se ve una fuente de agua potable, una buena limpieza o un artefacto que permita mantener la cadena de frío”, dijeron a El Imparcial de Tlaxcala especialistas en materia de salud.

 

Y la recomendación no debería caer en saco roto, “ya que casi todos estos comercios informales no cuentan ni con agua corriente, ni con sanitarios, para ofrecer un servicio que evite enfermedades, además de que no pagan impuestos, ni servicio de agua potable,” señalaron habitantes de Huamantla.

Además de los problemas de salud a los que se exponen los mismos vendedores por aspectos como su postura o su exposición al sol ponen en peligro la vida de los demás al utilizar combustibles como el gas.

Pidieron la presencia de la regidora de la Comisión de Salud del Ayuntamiento de Huamantla, Rosa Hilda Báez León, así como de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Tlaxcala (Coeprist), quienes no han hecho absolutamente nada para evitar la proliferación de este tipo de comercios informales.

Según fuentes al interior del Ayuntamiento de Huamantla, se han realizado inspecciones en las que incluso se decomisa mercancía, con el propósito de garantizar a los ciudadanos las condiciones de salubridad de establecimientos y productos alimenticios.

Sin embargo, “los puesteros no respetan el cumplimiento de varias obligaciones en lo que se refiere a higiene, mantenimiento y refrigeración de los productos, así como el tamaño máximo que puede ocupar del espacio público. Lo que debe reglamentarse es el modo con el que se accede al permiso y el lugar donde se ubicará el puesto”.

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