En esta etapa de transición del nuevo gobierno federal que encabezará Andrés Manuel López Obrador, hemos sido testigos de todo tipo de propuestas, alguna que otra contradicción y comienzan las críticas hacia el régimen morenista.
Sin embargo, se debe reconocer que la simpatía que sigue arrastrando el próximo presidente de México es la misma que durante campaña; incluso en su última visita a territorio tlaxcalteca miles de ciudadanos provenientes de diferentes partes del estado se dieron cita en la capital tlaxcalteca para saludarlo, estrecharle la mano, tomarse una foto o bien entregarle alguna petición con la firme convicción de ser atendidos, por el simple hecho que les genera que “su gallo” haya ganado pese a todas las adversidades y después de muchos años de lucha.
En algunos casos seguimos viendo a un Andrés Manuel López Obrador sencillo y carismático, parece que la euforia del triunfo que lo llevó a cometer varios tropiezos los ha superado y ahora se está concretando en recordar y enfatizar las propuestas que hizo a los ciudadanos en campaña en el recorrido de agradecimiento que está haciendo por los 32 estados de la república y que sin lugar a dudas le ha funcionado para arraigar aún más ese acercamiento con la ciudadanía, que sin pensarlo responde al llamado del presidente electo.
De hecho, seguramente una declaración que sacará ámpula a esta administración, será la legalización de la mariguana, tema que ya comenzó a llamar la atención de analistas nacionales e internacionales, sobre todo porque en algunos países es legal tanto la producción como el consumo de cierta cantidad; sin embargo a pesar de que México es considerado a escala internacional uno de los principales productores de amapola, no forma parte de las naciones autorizadas por la ONU para realizar el cultivo legal con fines médicos y científicos.
Cabe mencionar que es la ONU, el organismo que debe autorizar la producción legal de esta planta, empero en algunos países, como Afganistán, productor número uno de amapola lícita e ilícita, la ONU otorgó licencias provisionales a productores para contrarrestar los cultivos ilegales para el procesamiento de heroína, sin que esta política tuviera gran éxito.
El cultivo legal de opio en el mundo está legislado por la Convención Única sobre Narcóticos de Naciones Unidas, luego de que en 1930 comenzara la regulación del mercado de exportación mundial. Actualmente solo Australia, España, Inglaterra, Francia, Hungría, Alemania, Austria, China, India, Turquía, Eslovaquia, Japón, Macedonia, Nueva Zelanda, Holanda, Ucrania, Polonia y Rumania pueden cultivar de manera lícita la amapola.
De ahí que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha comenzado a sostener pláticas con la ONU para legalizar la amapola “única y exclusivamente para uso medicinal y recreativo, así como penalizar fuertemente la venta a menores de edad”, como lo dijo la próxima secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
En su visita a Zacatecas, Andrés Manuel se refirió a este tema, quien al respecto señaló que la propuesta de legalizar la siembra de amapola en la sierra de Guerrero que hizo el general Salvador Cienfuegos Zepeda, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), como una salida al problema de la inseguridad y violencia en esa región, se va a analizar, pues se debe dar un tratamiento integral a esa problemática a partir de atender las causas que la originan, como combatir la pobreza, generar empleos, bienestar y que se atienda a los jóvenes.
El próximo mandatario destacó que también se debe explorar la posibilidad que se le pague mejor al campesino que siembra maíz, ya que si se logra, puede ser una alternativa para que ya no siembre amapola.
Es un tema que recién comienza a abordarse, pero que ya con anterioridad se había propuesto como una forma de atacar al narcotráfico, ahora habrá que esperar que surjan más voces al respecto para ver cómo se va desarrollando y si al final logra concretarse esta iniciativa que a decir verdad, muchos ven con buenos ojos.