- Cap. Al-faro.
Un festejo en el que el dios del viento de los mexicas Ehecatl, se hizo presento e impidió que los diestros actuaran adecuadamente. El resultado del festejo fue el siguiente:
Ingresaron alrededor de unas mil 500 personas, tarde soleada, calurosa y con demasiado viento que impidió el lucimiento de los toreros. Los Toros de la ganadería de Montecristo, bien presentados en su conjunto, salvo del 3º, que fue deslucido.
José Mauricio, sus toros pesaron 476 y 484 kg, con los que obtuvo el siguiente resultado: Silencio en el primero y palmas en el cuarto.
Ernesto Javier “Calita”, sus toros en la báscula dieron los siguientes pesos: 464 y 490kg, en el segundo de la tarde se retiró a la barrera en Silencio tras aviso y con el quinto de la corrida obtuvo palmas al final de la lidia.
Diego Silveti, con el tercero que peso 451kg y el cierra plaza 482 kg Silencio tras aviso y ovación tras aviso.
El banderillero Gustavo Campos, destaco y saludó en el 4o y en varas, César Morales, picó con gallardía al 5o.
Destaco el gallardo puyazo de César Morales al quinto toro, siendo uno de los momentos estelares de la corrida, la caída que origino ese toro al hijo de “El Güero de la Capilla” que volvio a montarse a su caballo para picar a ese toro que empujo con fuerza, metiendo los riñones y empujando con mucha casta ante el peto de un señor picador.
Posiblemente para mañana, 21 de marzo, con los toros de Jaral de Peñas, se usan de nueva cuenta las nuevas puyas, las banderillas de punzón y las tizonas cromadas, de lengua de pato y filo temible, que le han devuelto a la lidia de los toros su atractivo, ya que al no causarles gran daño en los dos primeros tercios llegan con una fuerza y capacidad envidiable al último momento de su lidia: “El Tercio de la Verdad”
