Editorial

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Este domingo iniciaron las campañas, de forma oficial seis mujeres y un hombre buscarán ocupar el Palacio Ejecutivo durante los próximos seis años, en medio de la pandemia por el coronavirus, deberán saber llegar al electorado, de tal manera que logren convencerlos de salir a votar el 6 de junio, puesto que se observa apatía, hartazgo y decepción en la población.

Sin embargo, algunos candidatos la volvieron a hacer, repitieron el error del día de su registro, en el caso de Anabelle Ávalos Zempoalteca y Juan Carlos Sánchez García nuevamente convocaron a cientos de simpatizantes, poniendo en riesgo otra vez la salud de quienes asistieron al evento de arranque, efectuado en el zócalo capitalino y otro en las escalinatas.

Empero, vale la pena decir, que también debe caber prudencia y responsabilidad de los asistentes, porque no es posible que sabiendo como están las cosas, a los seguidores no les haya importado que el riesgo de contraer el virus del SARS Cov2 sigue latente.

De hecho el Instituto Electoral de Tlaxcala (ITE) hizo un exhorto a las candidatas y al candidato a evitar actos que pongan en riesgo la salud del electorado, se pidió que se privilegien los actos de campaña a través de redes sociales o transmisiones en vivo.

Solo en caso de que las condiciones sanitarias lo permitan, será posible hacer reuniones donde haya una distancia mínima de 1.5 metros entre cada persona, se haga uso de equipo de protección personal y disminuya el encuentro cara a cara, incluyendo la adecuación de los espacios y áreas abiertas para reducir la densidad humana en ambientes intramuros y extramuros, el aforo permitido que, de acuerdo a los colores del semáforo y las disposiciones estatales sanitarias, varían entre el 20-30 por ciento.

Estas son simples recomendaciones que seguramente no se tomarán en cuenta como ya lo vimos con algunos candidatos, si en realidad la intención era privilegiar la salud, entonces el árbitro electoral debió exigir el cumplimiento de estas medias, bajo sanción si hacían caso omiso a los ordenamientos.

Ojalá que no haya lamentaciones posteriores, lo que es cierto es que los siete candidatos aprovecharán cada minuto de estos 60 días de campaña para lograr las preferencias electorales el 6 de junio, ya comenzamos a escuchar propuestas, ahora habrá que esperar si quien llegue realmente las cumple.

Con el arranque de campañas, también comenzó la guerra sucia, de hecho la candidata de Unidos por Tlaxcala, denunció que previo al inicio de las actividades proselitistas, se puso en marcha en su contra una campaña de desprestigio, incluso dijo que espera entre candidatos sean respetuosos, pero no espera los mismo de Lorena Cuéllar.

Por otro lado, en la red social Facebook, comenzó a circular un video donde evidencian el nexo que aparentemente existe entre la candidata de la coalición Juntos haremos historia y René Bejarano, autor de las famosas ligas con fajos de billetes; evidentemente se desconoce al autor de la difusión del video; sin embargo, forma parte de la guerra sucia que en este proceso electoral estará presente.

 

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