Diego Ventura y Emiliano Gamero cortaron un apéndice

  • Cap. Francisco Al-Faro

CDMX. Cap. Al-faro. 13ª. Corrida de la temporada 2019-2020, de la Monumental Plaza de Toros México. Cartel histórico en la monumental el primer mano a mano entre rejoneadores. Actuaron el portugués Diego Ventura y el capitalino Emiliano Gamero, con cinco astados de Los Encinos y uno de Julio Delgado. Tarde lluviosa y fría, con menos de un tercio de entrada, los astados en el ruedo húmedo no rindieron lo que se esperaba.

Diego Ventura, rejoneo a: “Notario, Anfitrión y Agradecido” de la ganadería de los Encinos que promediaron 487 kilos, ante los tres astados tuvo una actuación irregular, sus astados con un solo rejón de castigo se aplomaron, los rejones de castigo, las banderillas cortas y largas fueron colocadas en forma desigual, lo que origino las ovaciones fueron las demostraciones de la doma de los caballos, en su primer astado tras una actuación caballistica irregular cosecho un apéndice, en su segundo ejemplar solo obtuvo el silencio y en el tercero cosecho palmas.

Emiliano Gamero, recibió a “Buen Amigo y Cortés” de Los Encinos que promediaron 498 kilos y “Cerrajero” de 557 kilos de Julio Domínguez, los rejoneadores actuales siguen la misma escuela, colocan un solo rejón de castigo que aploma totalmente al astado, después continúan con banderillas largas, banderillas cortas, todos los rejones mal colocados traseros, adelantados, caídos y contrarios, levantando el ánimo por las demostraciones de doma con sus caballos, el caballista fallo con el rejón de muerte en su segundo astado, desmontando y descabellándolo, con el cierra plaza continuo con la misma actuación y al final de su labor corto un apéndice, de estímulo.

Ambos caballistas intentaron recibir a sus astados a “Porta Gayola” y con la garrocha fallando en la suerte a realizar, sin embargo es digno resaltar la voluntad de agradar y cumplir con el público asistente y pese a la lluvia que cayó hasta el quinto toro actuó poniendo en riego a sus caballos y su integridad física.

Ambos caballistas con su primer astado, al clavar el rejón de muerte los descordaron, dañándoles la médula espinal, causándoles parálisis originando que cayeran en forma irregular al ruedo.

A los sobresalientes José Joel Ayala y Paulo Campero, como dice el refrán les salió “más caro el caldo que las albóndigas”, vestirse de luces sin tener la oportunidad de pegar un lance, en ninguno de los astados que se lidiaron.

Diego Ventura, colocando espectacularmente una banderilla a Notario”. Foto U. Alfaro Corte

Relacionados

Pin It on Pinterest