- Cap. Al-Faro
Huamantla, Tlax. -Debido a la crisis sanitaria originada por el COVID-19 que azota a todo el mundo, incluida la tauromaquia, el escrupuloso criador tlaxcalteca Antonio de Haro, dueño de la ganadería de “Rancho Seco” decidió vender diez toros que ya están puestos “a precio de carne” con la única condición de que él atestigüe su lidia y su muerte a estoque.
El ganadero comento: “Tomé esta decisión porque esos toros ya están puestos – listos para ser lidiados- Hay otros –toros- que ya se están poniendo y tengo que deshacerme de los que ya están puestos. Esa es la razón de ponerlos a la venta a precio de carne. Esos toros andan en los 550 kilogramos y me van a estorbar para recibir a los que se están poniendo. Es la única manera que hay” El espacio en los potreros es limitado y tanto toro compartiendo el espacio generaría peleas entre ellos.
La crianza del toro bravo, a diferencia de otras especies de reses, requiere cuidados muy especiales. Muchas veces su precio no alcanza a cubrir el costo que se generó a lo largo de su crianza.
Con esta medida urgente aseguro el ganadero: “apenas se recuperara entre cuatro y cinco meses de su crianza, su precio de carne en canal es apenas entre el diez y el quince por cierto de su valor real”.
“Yo no sé por qué otros ganaderos de bravo no han tomado esta medida. Es el único camino que hay. No se ve por dónde se pueda transitar a través de la crisis si no es así. El hecho de ver la lidia de mis toros es porque si hay uno que me guste en demasía irá para semental, pues regresará al rancho” sentencio.
La semana pasada se anunció que el domingo 26 de abril el diestro poblano Jerónimo lidiaría y mataría a puerta cerrada dos toros de más de media tonelada en la ganadería de De Haro.
Sin embargo, la Unión Nacional de Picadores y Banderilleros emitió un boletín a todos sus agremiados solicitándoles que se mantuvieran al margen de cualquier actividad taurina, lo que llevó a la cancelación de ese tentadero.
Los diestros Arturo Macías y José Mauricio lidiaron a muerte el 25 de abril, toros de diversas ganaderías, y esa actividad la trasmitieron a través de diversas plataformas digitales.
Toño de Haro, como así se le conoce al ganadero en el medio tlaxcalteca, comento: “Esa tienta la íbamos a realizar desde el rancho, pero la Unión Mexicana de Picadores y Banderilleros no quiso facilitarnos miembros. Ni siquiera contamos con el apoyo de la Asociación Nacional de Criadores de Toros de Lidia, no están haciendo nada para ayudarnos” también afirmo: que se siente muy desmotivado, no por la crisis sanitaria sino por la falta de unión y apoyo del gremio.
Finalmente comento, que se cumpliría el protocolo exigido :“En la ganadería teníamos todo previsto para hacerlo con dos toreros, un picador, un camarógrafo y yo, guardando la “Sana distancia”, todos separados con más de diez metros de distancia, pero no. Eso es algo que realmente desmotiva. Hacen falta ideas novedosas y me bloquearon la transmisión” puntualizo.