Qué le parece a usted, que ahora resulta que debemos estar contentos, porque a unos minutitos de nuestro pueblo mágico ya tenemos campo de golf. No tenemos seguridad, ni otros servicios públicos de calidad, pero sí tenemos un campo de golf, a unos metros de una de las zonas más pobres y con mayores problemáticas sociales como es el pueblo Ignacio Zaragoza. Pero además tenemos un gobernador buena onda que solo se dedica a inaugurar negocios, como este último, propiedad de una familia que ha sido favorecida por los últimos gobiernos estatales incluido el suyo.
Tildado de esnob y elitista, el golf es un deporte que no se ha podido sacudir prejuicios y gana adeptos a base de supuestos buenos argumentos: como que es un excelente ejercicio cardiovascular, se practica al aire libre, relaja, tonifica la musculatura y es un deporte de baja intensidad.
Sin embargo, uno de los mayores problemas y que debería conocer la ciudadanía es que de acuerdo a especialistas un campo de golf de 9 hoyos ocupa una superficie de 30 campos de fútbol y necesita al año 9 mil millones de litros de agua, un consumo equivalente al que realizan unas 200 mil personas, el doble de habitantes que actualmente tiene Huamantla. Mientras en algunas zonas existe el desabasto de agua potable. Sumado los problemas que existen este organismo. En fin, si usted tiene los suficientes recursos, pague sus membresías y juegue al golf. Y ya que hablamos de este tema, mi comadre Martita me contó que el primer regidor, por cierto, del PRI, Sergio Zamora, de quien muchos ciudadanos siguen preguntando ¿cuál ha sido su trabajo en el ayuntamiento?, resulta que, aunque él nunca está en las oficinas de regidores ubicadas en el edificio los Morales, si tiene a una secretaria que le informa de absolutamente todo, la que por cierto fue elegida por sus atributos físicos, porque así lo pidió el regidor. Qué bueno porque para sacar copias y contestar el teléfono se necesita buena condición física.
Pues qué le cuento, resulta que mi comadre panchita que es una de las buenas vendedoras de revistas y periódicos, me dijo que el pasado martes por la mañana una vez que se disponía a vender el Imparcial, que llega un joven de no muy malos bigotes y que le dice que le vendiera todos los ejemplares de este semanario, mi comadre no tuvo de otra más que venderle a este muchacho más de 300 periódicos. Le pregunté cuál era la razón para que alguien quisiera tantos periódicos, y resulta que según ella fue porque en la portada venía nada más y nada menos que la nota de las declaraciones que hizo el ingeniero Quiroz Bello, ex director de la comisión de agua potable y alcantarillado del municipio de Huamantla, y es que este señor dicen que se voló la barda en la entrevista que le concedió a mi compadre Manuel Rojas, pues según lo dicho por el ingeniero, en este organismo se han aumentado los costos de algunos trabajos de manera ventajosa y lo peor es que le echa la culpa de todo a la jefa de jefas, lo que se me hace raro porque no la creo capaz de tal cosa.
Es cierto que le gusta la política y que le puso cualquier cantidad de obstáculos al guapísimo de Nachito Ramírez durante su campaña política, es más, hay quien asegura que hasta se alió con la amandititita para que perdiera la elección el charro de Huamantla, pero de eso a que haga y deshaga en la comisión del agua, sinceramente no la creo capaz. Bueno, el caso es que quien sabe quién y con quién sabe que intenciones, compraron la mayoría de ejemplares de el Imparcial, pero no contaba con que este semanario, se vende en todo el estado y se lo digo porque su servidora cada vez que llega de Jalapa a la ciudad de Tlaxcala, lo encuentra en los puestos de periódicos, lo mismo lo encuentra usted en Zacatelco que en Apizaco. El caso es que la información corrió como agua en la barranca de San Lucas, antes de que “cheche” mandará construir el bulevar Cuamanco.
Una raya más al tigre que cada día se parece más al ixtlapache. Resulta que el seriamente comprometido no conforme con no poder resolver todos los problemas que hay en el pueblo mágico, se fue cinco días a Zacatecas, y lo hizo para asistir a una competencia charra en la cual una de sus retoños participó, y qué bueno que lo haga, pero mientras las cosas estén de a peso en la ciudad, por prudencia lo mejor sería solucionar la larga lista de problemas del pueblo mágico donde la Ley se aplica ocasionalmente, y si no, los que se dicen reporteros que le pregunten al director de la policía municipal, ¿por qué cuando se le ocurre, echa andar sus operativos para poner orden en la ciudad? Hace unos días el famoso comandante “tilín” y el comandante “alcantarilla”, empezaron a despejar las zonas en las que hay apartados de espacios, que bueno que lo hagan pero la Ley que yo sepa, se aplica todo el tiempo, todos los días, y en todas partes, no a contentillo y cuando se les da la gana a los señores. Porque mientras esto sucede los comerciantes de temporada se apoderan de las calles ocasionando todo tipo de problemas a la vista de todos los ciudadanos, pasándose la ley por el arco del triunfo, ¿entonces de qué se trata?, congruencia señores, congruencia.