- Sergio Espinoza
Apizaco, Tlax.- Este día, de forma obligada presentó su renuncia a la titularidad de la Dirección de Seguridad Pública, Protección Civil, Vialidad y Transporte (DSPPCVyT) de Apizaco en Tlaxcala, Jorge Eduardo Villarreal Badillo, luego de que policías se manifestaran con un paro de labores en demanda de mejores condiciones para desempeñar labores de seguridad, los que acusaron que por falta de equipamiento -horas antes- uno de sus compañeros murió en cumplimento de su deber.
Tras enterarse de que Margarito Guzmán Carmona (policía tercero) había dejado de existir en el hospital donde fue intervenido quirúrgicamente por la herida de bala en el tórax, a las 07:00 horas en el cambio de turno los elementos policiales y unidades se concentraron en la Comisaría de Seguridad rielera ubicada en Avenida de las Torres, donde iniciaron un paro “técnico” de labores en exigencia de mejores condiciones laborales, así cómo la renovación del equipo y cubrir faltantes de armamento.
En la reunión emergente de poco más de un hora de duración, que fue atendida personalmente por el Alcalde interino Carlos Hernández Castillo, los uniformados reprocharon al todavía titular, temas operativos y de servicio pero principalmente la falta de armamento y las deficiencias en los equipos de protección personal para cumplir con sus funciones de seguridad; llegando a exigir a gritos la destitución inmediata del Comisario, quién fue entrevistado por este medio al abandonar las instalaciones de seguridad.
En el breve acercamiento con algunos medios Villarreal Badillo, admitió entre repartición de culpas y justificaciones que su subordinado que no se puede dejar fuera de servicio por la necesidad de tener presencia policial, atendió desarmado y sin chaleco balístico el reporte de asalto a un comercio, dónde fue baleado por él o los prepetradores:
“Lo del armamento que menciona el personal, pues no están en mis manos (…) el personal que no aprueba sus exámenes de control y confianza no se le puede proporcionar un arma, no es una decisión mía son requisitos que se tienen que cumplir”
Para argumentar el jefe policiaco que:
“Desde un principio se les exhortó a qué lo trajeran (chaleco antibalas) son implementos que se desgastan al través del tiempo, siempre tuvieron la indicación de traer sus chalecos en las condiciones que estuvieran en algo les pudiera servir, no lo quisieron hacer no acataron esa disposición”.
Por otra parte, a pregunta expresa en cuanto a la exigencia de los uniformados que pedían su destitución, Villarreal Badillo aseveró “lo más sano es retirarme”, esto al tiempo de apuntar que en la corporación hay elementos que “no les gustan que los sancionen” y que existen casos de directores de policía “caidos”, para justificar la utilización de efectivos para su seguridad personal,
Por su parte el Alcalde en funciones de Apizaco, Carlos Hernández, lamentó lo sucedido y dijo se dará todo el apoyo a los deudos para enfrentar la situación del elemento caído en cumplimiento de su deber, señalando que tras asumir el cargo entre las primeras acciones que ha atendido está el tema de la seguridad de la que no le habían sido dados algunos pormenores; para abundar diciéndo que tras dialogar con los policías se ha llegado a algunos acuerdos que se cumplirán de -manera preferencial- en relación al armamento y los equipos de protección.
Para finalizar, diciendo que Jorge Eduardo Villarreal Badillo presentó su renuncia al cargo de Director de la policía municipal, la que fue aceptada para satisfacer la demanda de los uniformados; que en tanto se analicen los perfiles para designar (en las próximas horas) a quien será la persona que tenga la titularidad del área de seguridad; estará al frente un encargado de despacho.
Tener presente que en las primeras horas de este miércoles Margarito -N- el policía caído, fue asistido y trasladado por PC rieleros a un hospital público, tras resultar herido de gravedad; cuando desarmado y sin equipo de protección personal, atendió reporte de asalto a una farmacia ubicada en la Prolongación del Boulevard La Libertad de la colonia Fátima, el que fue intervenido quirúrgicamente y pasado al área de cuidados intensivos, dónde al amanecer dejo de existir.