- Redacción
CDMX, Méx.- Jaspeados, palomos, de bolita, emplumados, aztecas, rayados, de gasa y bordados son solo algunos tipos de rebozos, prenda femenina multifacética que en estas fiestas patrias se convierte en protagonista. Para enaltecer el significado y valor artesanal de esta pieza tradicional, el Museo Nacional de Culturas Populares es, por décimo año consecutivo, sede de la feria artesanal Tápame con tu rebozo. Arte textil mexicano.
Del 12 al 15 de septiembre los asistentes al recinto museístico de Coyoacán podrán disfrutar de conversatorios, talleres, conferencias, lectura de poesía y expo venta en esta feria artesanal organizada por la Secretaría de Cultura, a través de la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas (DGCPIU).
Alrededor de 48 grupos artesanales de Aguascalientes, Chiapas, Estado de México, Querétaro, Guerrero, Hidalgo, Michoacán, Morelos, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas mostrarán la riqueza textil presente en los rebozos mexicanos y la diversidad de esta rama artesanal en nuestro país.
Las actividades comenzarán el jueves 12 de septiembre, a las 12:00 horas, con la inauguración. Posteriormente, a las 17:00 horas se llevará a cabo el conversatorio “Rebozos antiguos: luto de aroma y reservista”. Participarán los artesanos Guillermo Álvarez Segura, María de la Luz Morales y la investigadora Ana Celia Martínez.
En esta charla se develarán algunos secretos de estos dos tipos de rebozos en vías de extinción, sus complejidades técnicas y significado. El “luto de aroma”, por ejemplo, es nombrado así por su color negro perenne, que se logra gracias a un teñido muy especial tratando ciertos metales con agua en un recipiente; a este método se le conoce como “de olla podrida”. Luego, para desaparecer el penetrante olor que queda en la tela, se mezcla con yerbas aromáticas, que le dan su nombre. El reservista, por su parte, se confecciona en telar de cintura con labrado de urdimbre con más de cinco mil hilos que permite plasmar estampados muy complejos. Es uno de los más difíciles de hacer.
A las 19:00 horas, la tejedora Jazmín León Cabrera presentará el proyecto Memoria Nahua, en el que se busca el fortalecimiento de la lengua y la cultura del pueblo náhuatl de Cuetzalan, Puebla.
Con el objetivo de reflexionar acerca de que un trabajo artesanal vale lo que cuesta, el viernes 13 de septiembre, a las 12:00 horas, la artesana Natividad Avelino impartirá un Taller de bordado, cuya técnica heredó de su familia, oriunda de la comunidad nahua de Acatlán, Guerrero, lugar donde el rebozo está intrínsecamente ligado con las fiestas patrias. El acceso es con registro previo, en el número: 55 41 55 03 55.
Luego, a las 17:00 horas, artesanas de Chiapas, Michoacán, Oaxaca y Puebla, algunas de ellas descendientes de los pueblos nahua, tsotsil, purépecha y zapoteco, abordarán en el conversatorio “Entrelazando pensamientos: Respeto a los derechos colectivos” la problemática del plagio de sus prendas por diversas empresas, el valor del trabajo de las tejedoras y tejedores, así como la defensa de su cosmovisión y la iconografía plasmada en la indumentaria.
El sábado 14 de septiembre, a las 12:00 horas, la tejedora Martha Juliana Sernas impartirá el Taller de bordado de San Antonino, Oaxaca, municipio de cepa textil, donde las habilidosas manos de los artesanos han maravillado al mundo, algunas de sus creaciones implican siete técnicas distintas para la hechura de un rebozo.
Más tarde, a las 18:00 horas, la investigadora Verónica Cortés dará la conferencia “El rebozo. Cobijo de significados”. Explicará cómo esta prenda ha acompañado múltiples momentos en la vida de los mexicanos, tanto en los pueblos indígenas como mestizos. Ha sido cuna, instrumento de trabajo en las jornadas cotidianas, prenda para cubrirse del frío o el calor, accesorio en bailes populares, festividades y hasta empleado en rituales de luto.
Finalmente, el domingo 15, a las 12:00 horas, Rosita López Ladxidua, artesana tejedora, ofrecerá una lectura de poesía en lengua zapoteca.
Cada rebozo es único e inigualable, identifica al pueblo o región de pertenencia. Su elaboración es en telar de cintura o de pedal y los materiales comprenden algodón, seda, lana y varias fibras sintéticas. Con la técnica que cada artesano y artesana usa, deja su historia, sus ojos, sus manos y parte de su espalda porque es una tarea que implica estar sentado.
La herencia cultural del rebozo se ha conservado a pesar de los plagios sufridos por parte de empresas de diseño, la moda que lo ha hecho a un lado o la disminución del número de artesanos que los elaboran. Forma parte de la riqueza cultural y económica del país, por ello para la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través de la DGCPIU, es importante fomentar su promoción, difusión y uso.
La feria artesanal Tápame con tu rebozo. Arte textil mexicano se llevará a cabo del 12 al 15 de septiembre, en el Museo Nacional de Culturas Populares, ubicado en Av. Hidalgo 289, colonia Del Carmen, Coyoacán, Ciudad de México. La entrada es libre.