- Manuel Rojas / Víctor Rosete
Huamantla, Tlax.- Era la madrugada del domingo 6 de octubre, cuando los gritos y sonidos de violencia, rompieron el silencio de la calle y la obscuridad del emblemático Barrio de San Lucas en el Municipio de Huamantla y fue cuando un grupo de 6 personas, entre ellas tres mujeres, llegaron al domicilio de los hoy fallecidos que en vida obedecían a los nombres de Miguel y Uriel Valencia Lara de 35 y 30 años respectivamente, para agredirlos con armas punzocortantes.
De acuerdo al reporte recibido en el número de emergencia 911, los hechos ocurrieron en el barrio de San Lucas del Municipio de Huamantla, alrededor de las 2:30 horas del domingo 6 de octubre, en la calle 5 de Mayo y Ricardo Flores Magón.
Al lugar acudieron los servicios de emergencia de Cruz Roja delegación Huamantla abordo de la unidad 663, quienes se percataron que dos personas del sexo masculino no contaban con signos vitales, por lo que se dio parte a las autoridades correspondientes. Uno de ellos presentaba exposición de masa encefálica y severos golpes en el cuerpo, el otro tenía heridas en abdomen y tórax por arma blanca; lesiones que les arrebató la vida casi de forma instantánea.
Según la información que los propios familiares de los hoy finados, previamente ya se había dado un altercado en un evento de pelea de gallos entre estas personas que en búsqueda de venganza se organizaron para cometer este doble asesinato a sangre fría, pero fue en la madrugada cuando un grupo de sujetos llegaron al domicilio dando punta pies a la puerta con gritos y groserías y desde luego en evidente estado alcohólico y al parecer intoxicados con estupefacientes.
Los hermanos salieron a reclamar por lo que estaba pasando y al asomarse a la puerta los sacaron a golpes y los apuñalaron en varias ocasiones, uno de los hermanos quedó herido de muerte enfrente de su casa, el otro con más resistencia quedó tendido en la esquina, pues al recibir múltiples puñaladas no caía al piso hasta que uno de ellos le golpeó con un bate en la cabeza destrozándole literalmente el cráneo, falleciendo al instante.
Los agresores huyeron, pero hubo quien los pudo identificar gracias a una cámara de video vigilancia de un negocio que se encuentra a unos pasos del lugar de los hechos y en el que se pudo constatar que tres hombres y tres mujeres, fueron identificados como los agresores, incluso en el video se puede constatar que uno de ellos llegó acompañado de un perro pitbull, que utilizó para atacar a los occisos.
Fue entonces que los vecinos y familiares se organizaron para detener a las tres mujeres identificadas como Monserrat N., Verónica N. y Beatriz N; toda vez que viven cerca del domicilio de los jóvenes asesinados; así como a dos de los masculinos, de quienes no conocen sus nombres pues sólo saben que son parejas sentimentales de las mujeres, el tercer masculino que participó en el asesinato logró darse a la fuga y hasta el momento se desconoce su paradero.
Los servicios de emergencia permanecieron hasta las 4:00 horas del domingo y el Servicio Médico Forense no había llegado para realizar el procedimiento de Ley. Fue hasta minutos después que hizo su arribo, de la que su personal llevó a cabo el protocolo de ley y retiro de los cuerpos que estaban acompañados de unas veladoras encendidas que colocaron los vecinos, quienes lamentaron el deceso de los hermanos, y criticaron amargamente que la autoridad municipal en funciones, haya sido rebasada por la delincuencia.
A través de un comunicado la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que se ha iniciado la carpeta de investigación CIUIHOM-N/58/2019 por el delito de homicidio calificado, para recabar indicios contundentes por los hechos ocurridos en el municipio de Huamantla, donde dos personas del sexo masculino fueron privadas de la vida por heridas punzo cortantes.
Sin embargo, no se habla de algún asegurado, pese a que los familiares afirman que cinco personas fueron detenidas por los propios vecinos al ser identificados como los agresores y fueron entregadas a los policías ministeriales cuando éstos llegaron al lugar de los hechos.
En el boletín emitido por la PGJE se afirma que “los especialistas de la Unidad de Investigación Especializada de Homicidios Dolosos de la PGJE arribaron al lugar con la finalidad de recabar indicios que ayuden al esclarecimiento de los hechos”.
“De la misma manera, el grupo de peritos especialistas acordonaron la zona e hicieron el levantamiento de los cuerpos, los cuales fueron trasladados a través del Servicio Médico Forense (Semefo) a las instalaciones de la PGJE para practicarles la necropsia de ley”. De acuerdo a las primeras líneas de investigación, los hermanos asesinados estuvieron involucrados en una riña.
La Procuraduría de Tlaxcala se encuentra en fase de investigación con el propósito de esclarecer el doble homicidio y fincar responsabilidades de acuerdo a la ley.
En el recorrido que El Imparcial de Tlaxcala realizó por la zona para obtener más datos del doble homicidio, vecinos y familiares denunciaron que constantemente suceden riñas en las calles del Barrio de San Lucas, por el incremento de las pandillas y desde luego por la ausencia de las autoridades, a las cuales se les hace el llamado al 911 y llegan hasta 1 hora después, cuando todo pasó o simplemente no llegan.
En nuestra investigación las personas entrevistadas coincidieron al expresar que ya se ha vuelto un lugar violento e inseguro pues continuamente hay robos a transeúntes, casa habitación, negocios e intimidación a los vecinos por parte de delincuentes que ya son conocidos, pero por miedo a represalias prefieren no denunciar.
Los vecinos argumentan que en repetidas ocasiones se ha hecho un llamado a la presidenta de comunidad Nataly Montiel y a las autoridades municipales encabezadas por Jorge Sánchez Jasso, pero tal parece que evaden su responsabilidad de brindar seguridad a los ciudadanos, toda vez que los rondines son escasos y pese a existir un módulo de seguridad a escasos metros, sobre el boulevard Cuamanco, tiene más de seis años cerrado, por ello la gente está harta de que no cumplan las promesas que hacen cuando andan en campaña.
Habitantes del barrio de San Lucas señalaron que las autoridades municipales encabezadas por Jorge Sánchez Jasso, evaden su responsabilidad de brindar seguridad a los ciudadanos, ya que no hay vigilancia, “de qué sirven las patrullas nuevas y las cámaras, si no hay recorridos ni prevención de los delitos, estamos indefensos ante los delincuentes”, comentaron.