- Karla Cortés
Huamantla, Tlax.- Aunque no se conocen las mediciones de contaminantes que tiene la zona oriente del Estado de Tlaxcala, “es evidente que el transporte público es el que más contamina el medio ambiente en Huamantla”, aseguran habitantes pues aunque muchos pasan los procesos de verificación, aun así contaminan visiblemente”.
Expusieron a El Imparcial de Tlaxcala que resulta evidente que algo está fallando en ese proceso de verificación de las unidades del transporte público, “al ver la forma en que contaminan surge la pregunta de si pasan un proceso de verificación vehicular y de ser así, hay que saber quién los controla”.
Señalaron que la mayor contaminación de la actualidad se presenta en el transporte público y particular; por lo que hace falta mayor control en las verificaciones, “Lo que muchos hemos cuestionado, es que cuando andamos en la calle, vemos que el transporte público, evidentemente, es un gran contaminante, por eso, se necesita saber si pasan por un proceso de verificación vehicular”.
Aseguraron que el municipio de Huamantla se debe alinear a los sistemas de verificación de las grandes ciudades, por lo que se debe tener el mismo nivel de verificación, sin embargo el transporte público todavía deja mucho que desear.
Lo que perciben los ciudadanos es que Huamantla está retrasado en la estandarización de los niveles de medición de contaminantes, además reiteró que todavía se observa que el transporte público mantiene altos niveles de contaminación; sin embargo, circulan por las calles del pueblo mágico sin mayor problema.
La contaminación del aire en las grandes ciudades no tiene un solo culpable pese a que cuando se trata este asunto todos señalan a los coches. Pero estos no son ni mucho menos los únicos causantes de la contaminación.
Por ejemplo, en términos de emisiones de dióxido de carbono (CO2), un autobús siempre contamina más que un coche: aproximadamente 750 gramos de CO2/km, frente a una media de 130 g. de CO2/km. Claro que el impacto de un autobús es menor cuando se miden las emisiones por pasajero.