- Ariadna Huerta
Huamantla, Tlax.- La problemática relacionada con la actividad de algunos locales que abren sus puertas sin medidas de control para el consumo de bebidas embriagantes no es nueva. “Un ejemplo claro de esto, es un local ubicado en la esquina de la avenida Hidalgo y calle Reforma”, denunciaron habitantes de la ciudad de Huamantla.
Externaron que en este lugar el ingreso de jóvenes es frecuente hasta altas horas de la madrugada, lo cual es una realidad que está a la vista de todos y que además queda plasmada en las redes sociales, donde se evidencia el consumo de alcohol y el estado en que se encuentran los jóvenes, algunos de ellos apenas superan la mayoría de edad”, manifestó el señor Carlos García.
“Se trata de una problemática que se ha convertido en un tema de interés público, por lo cual muchos padres piden que se tomen las medidas necesarias de manera urgente”, agregó.
Advirtieron que la falta de control por parte de las autoridades pertinentes, en este caso del Ayuntamiento que preside Jorge Sánchez Jasso, para regular la habilitación y el funcionamiento de los bares, está despertando críticas sobre la capacidad del municipio para fiscalizar el funcionamiento de estos lugares.
“El problema de estos comercios tiene que ver con la falta de cumplimiento a la normativa en las actividades de control en locales de actividad nocturna”.
Señalaron que la venta de alcohol en esos sitios se ha convertido en un grave problema para la sociedad desde hace ya mucho tiempo. “Si bien hay una Ley que lo prohíbe, algunos locales siguen comercializando sin importar la edad de los consumidores, ni el horario en que se realiza”.
Este panorama se puede observar recorriendo durante la noche y madrugada las diferentes comunidades y zona centro del municipio de Huamantla, expresaron.
Por ello realizamos un sondeo para conocer la opinión de la ciudadanía acerca de este tema. Entre los entrevistados algunos manifestaron que también existen lugares, sobre el boulevard Cuamanco y la calle Allende, en donde llama mucho la atención la presencia de adolescentes, principalmente durante los fines de semana.
“Se puede observar la facilidad con la que éstos acceden al consumo de bebidas alcohólicas y lo que es peor, la tranquilidad con la que los dueños de los establecimientos hacen caso omiso a las normativas vigentes”.
Expusieron que muchos de los lugares donde se reúnen jóvenes y adolescentes para consumir bebidas embriagantes, “no respetan la capacidad permitida, ni cuentan con las medidas de seguridad pertinentes y reina el descontrol por parte de menores, indicaron los adultos que concurren a esos lugares”.
Los entrevistados también señalaron que otro tema son las denominadas “fiestas privadas, donde menores de edad acuden y consumen toda clase de bebidas para quedarse hasta tarde en casas de familias o particulares y equiparan la diversión con el consumo de alcohol. Durante estas actividades no existen ningún tipo de medidas de seguridad ni presencia de adultos, por lo que el consumo de alcohol es libre”.
Para restringir el consumo de alcohol, propusieron que las propias las familias pongan límite, así como el gobierno local promueva normas para restringir el consumo, porque aunque existe una regulación que lo prohíbe, no basta con que exista una ordenanza, sino que hay que hacerla cumplir.