- ManuelRojas
Ixtenco, Tlax.- Pese a figurar como uno de los peores presidentes municipales de Ixtenco, sobre todo por protagonizar hechos de violencia, en los que resultaron varios ciudadanos lesionados el 14 de marzo de 2018, día que a la fecha las instalaciones de la presidencia municipal permanecen cerradas, Miguel Ángel Caballero Yonca ha manifestado su deseo por competir por una diputación local en el Congreso de Tlaxcala.
Pobladores del Municipio de Ixtenco continuamente han descalificado la administración de Caballero Yonca por falta de transparencia, y el rechazo ha crecido desde los hechos de violencia ocurridos en marzo de 2018. “Ha tenido muchas instancias de acercarse, de entender, no ha hecho nada, no está entendiendo las demandas sociales, no está hablando. Está desconectado de la realidad del municipio de manera absoluta. No sé si pueda seguir teniendo algún cargo, si no está entendiendo lo que está pasando en Ixtenco”, criticó uno de los entrevistados.
“Es momento de que los mismos políticos que han estado en el poder a pesar del rechazo popular se retiren; eso significa que otras personas tienen que involucrarse”.
Los ciudadanos del ultimo bastión otomí en Tlaxcala, también señalaron que quienes ya están en un cargo tienen una ventaja adicional, pues aunque la Ley establece que los candidatos no pueden empezar a hacer campaña hasta llegado el tiempo que marca el calendario electoral, quienes se encuentran en un puesto como Caballero Yonca usan sus eventos oficiales, y sus presupuestos para acercarse a los votantes mucho antes.
Recordaron que en marzo de 2018, por culpa de Caballero Yonca ocho patrullas de municipios cercanos que él mando traer, fueron dañadas en parabrisas, espejos, puertas, llantas, incluso, algunas fueron volteadas por los pobladores, asimismo, más de cinco motocicletas que también presentaron afectaciones por parte de los inconformes.
En su oportunidad el gobernador del estado, Marco Mena Rodríguez, recriminó que Caballero Yonca hubiera ignorado el llamado de la Secretaría de Gobierno para solucionar a través del diálogo y no acrecentar el conflicto que prevalecía en Ixtenco.